jueves, 8 de mayo de 2014

Sentencia

No ha mucho que los gerifaltes vaticanos –esos respecto a los cuales España sigue siendo, para desgracia de sus pueblos, reserva espiritual de Occidente– despojaron al limbo de toda sustancia, degradándolo a la categoría de fatua entelequia. No obstante, a aquellos que en este país nos negamos a comulgar con el bárbaro ideario del nacionalcatolicismo devoto de Frascuelo y de María, ellos, los rancios de la curia y el poder patriotero del ¡Arriba España en venta a saldo!, pretenden hoy condenarnos al limbo civil. Paradojas de una aconfesionalidad burdamente impostada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario