viernes, 28 de febrero de 2014
Las voces que hay en mí...
Las voces que hay en mí son una
–v
oz única o, acaso,
sólo un silencio antiguo
transitando los siglos desde el ay primigenio
–;
sólo cambian las musas
que envenenan mi oído.
Ilustración:
Minerva y las musas
(1640), de
Jacques Stella
1 comentario:
Anónimo
1 de marzo de 2014, 7:39
Las musas no son tan malas, además de envenenarlo lo diversifican y te dicen: venga otra cruzcampo
Responder
Eliminar
Respuestas
Responder
Añadir comentario
Cargar más...
‹
›
Inicio
Ver versión web
Las musas no son tan malas, además de envenenarlo lo diversifican y te dicen: venga otra cruzcampo
ResponderEliminar