Te cierras sobre mí
como el mar sobre un pecio
dando luz a sus sombras,
como el aire asfixiante
que en su herrumbre sin tregua
colma el barro de aliento.
Y así ya eres la sangre,
hondo mar, mar abierto,
que incendia las distantes
penumbras de mis venas.
como el mar sobre un pecio
dando luz a sus sombras,
como el aire asfixiante
que en su herrumbre sin tregua
colma el barro de aliento.
Y así ya eres la sangre,
hondo mar, mar abierto,
que incendia las distantes
penumbras de mis venas.
Demasiado bello, me hace llorar.
ResponderEliminarTe quiero alma mía.
M.
Còmo te inspira Malena, no me extraña, es muy bella por fuera y por dentro. Una vez entré en su blog y sus textos son pura magia.
ResponderEliminarSean felices.
Besos