martes, 9 de marzo de 2010

Seguidilla (II)


Clavada en las entrañas
Llevo una espina;
No me la arranques, rosa,
Que moriría.

Sin tu fragancia,
Tu espina, único freno
Pa’ mi hemorragia.

9 comentarios:

  1. ¿Qué tendrán las seguidillas que me gustan tanto? Será el ritmo, la musicalidad, ese sabor a la tierra de los míos.En fin...Un beso

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  2. Si gustan las seguidillas,
    casi tanto
    que con el ritmo que marcan
    se olvida una
    que es un lamento
    que vas mandando.


    Besos!!!

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  3. Es curioso como, a veces, es precisamente lo que nos causa la herida lo que paradógicamente nos hace vivir.

    Un beso

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  4. Jo, Rafa, qué poeta eres; no se te resiste "na de na". Besitos!!

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  5. Jeje jejej....estaba escribiendo para hacerte la correción...pero vaya,chico listo que lee y relee...

    y el error ha desaparecido

    mas besos

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  6. Wooo perfecta seguidilla!!, lo que causa una herida ciertamente a veces nos mantiene con vida, otras nos mata poco a poco.

    Más besos

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  7. Nunca hice una seguidilla, la tuya me encantó.
    Intento hacer una...
    Una espinita tengo
    dentro clavada
    de un amor que se fue
    sin arrancarla.
    Sangra la herida
    cada vez que le nombro
    por las esquinas.
    Si no esta bien, te importa corregirme?
    Un besito Rafa

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  8. Mas andaluz imposible, tiene un aire, un aonoridad que va muy bien con esas tierra...un abarzo.

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