domingo, 30 de agosto de 2009

Ω


Lo mismo que un caballo desbocado,
Relincho de cristal,
Cayó la noche.

La luna y las estrellas, asombradas
Y gélidas, pugnaban en lo oscuro
Por no otorgarle crédito al estrépito,
Y a luz daban aullidos apagados
Tratando de enfrentar a las penumbras
Destellos blancos.

Mas no era tiempo ya de lobos.

Como hormigón, como un caballo
Loco
Fraguó la noche.

2 comentarios:

  1. Cayó el caballo
    Tras él,
    la noche gapolante
    aullidos rebeldes
    Persigue
    relinchando…

    Mas no era llena la luna
    Y un abismo afilalado
    Abrió sus fauces
    Ahogando,
    Agonizando
    De crines
    Su paso


    besines

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  2. Tremendo como todo lo que escribes, reconozco que a veces me cuesta adentrarme en los versos, y captar lo que dices, pero precisamente eso es lo que más gusta.

    Besos

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