sábado, 2 de mayo de 2009

Capitulación


Desairado el aliento de su boca,
Deambula entre cenizas sin rescoldo
Asido del pulmón de acero fatuo
De los sueños.

Ilustración: “Ondina”, de John William Waterhouse

5 comentarios:

  1. Hay un dicho por ahí que dice: donde hubo fuego cenizas quedan, quizás dentro de esas cenizas aun quede alguna chispa donde agarrarse para desprenderse de ese pulmón de acero fatuo y volver a respirar por ti mismo, por esos sueños que nos mantienen en pie.
    Un beso con mi aire, por si acaso.

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  2. Quizás esté perdido entre las finas hojas de los sueños...

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  4. Que bonito...pero que difícil es este poema..
    Desairado de desaire??? o sin aire??
    Besets

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  5. Sueños, Rafa..., dejálos crecer. No es un consejo, paso de consejos, pero no puedo remediar ser una soñadora eterna, son mi pulmón, son el impulso que me tira a la vida.

    ¿Incauta? Seguro

    Besos

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