En el fondo
Me mueve la sonrisa.
Es cierto que su lecho es nieve a gritos,
Que una perenne pátina de lágrimas
La ciega, la amordaza, la fractura,
La altera y forja un rictus espantoso
De sed,
De sal,
De límites.
La inercia sin retorno es ala herida
Que ya se abandonó a vagar sin sueños,
Mas nunca cambiaría esta hemorragia
Por un camino atrás sin sus cristales.
En el fondo
Me muero en la sonrisa.
Me mueve la sonrisa.
Es cierto que su lecho es nieve a gritos,
Que una perenne pátina de lágrimas
La ciega, la amordaza, la fractura,
La altera y forja un rictus espantoso
De sed,
De sal,
De límites.
La inercia sin retorno es ala herida
Que ya se abandonó a vagar sin sueños,
Mas nunca cambiaría esta hemorragia
Por un camino atrás sin sus cristales.
En el fondo
Me muero en la sonrisa.
Mi niño Pasa a buscar algo para ti aqui
ResponderEliminarhttp://moonshadowfireheart.blogspot.com/2009/03/un-pequeno-gesto.html
La "muerte" da opción a muchas metáforas, por eso no me asusta leerte, pero por favor, no te mueras, ni a carcajadas.
ResponderEliminarUn poema muy triste, a pesar de las "sonrisas".
Un abrazo grande, Rafa.
En el fondo, subyace tu poder de transmutar rictus en sonrisa, gritos y cristales en música e inercia en poesía
ResponderEliminarYo aprendí con lágrimas, a hacer un cambio muy saludable,cambiar la palabra necesitar ..por la de me gustaría...menos intensa..menos poética ...menos de todo pero que a la larga nos da muchísima más felicidad(esto se me ocurre por la frase del pintor de paredes...)
ResponderEliminarMe gustaría que me sonrieras y sonreirte yo a ti ...
Besos
dafne
Crudísimo.
ResponderEliminarSonrisas para iluminar este instante.