Anida en la liturgia del silencio, Obstruye a cal y canto tus oídos, No te enternezcas, nunca Me escuches, Jamás des crédito a mi cántico: Aun siendo mis palabras verdaderas, Mi aliento no es más que una fría mentira Con el tiempo contado.
Suele ser asi como dices...tan efímero.. que cuando apenas has caído subyugada por el misterio,ya ha acabado el tiempo que te han concedido. Cal y canto para mis oidos!!! Besos Dafne
Hola, Rafa. Yo no tuve más remedio que dejar de creer en tus "cánticos", de lo contrario, o hubiese tenido que dejar de leerte, o bien, haber hecho lo imposible para que fueras al psiquiatra, me tenías simpre el alma en vilo. Claro, que eso no quita que tus palabras me enternezcan.
Suele ser asi como dices...tan efímero.. que cuando apenas has caído subyugada por el misterio,ya ha acabado el tiempo que te han concedido.
ResponderEliminarCal y canto para mis oidos!!!
Besos
Dafne
Me rehúso...¡Yo me lo quiero creer! (Al menos mientras dure)
ResponderEliminarBesos Rafa.
Me gusta mucho esa imagen.
Psicología inversa.
ResponderEliminarFeliz Domingo Poeta. Abrazos
A tus versos que me baten les dejo la huella de mi visita. Abrazo entreletras y domingos, Isa
ResponderEliminarTus palabras dicen una cosa, el sentimiento dice otra,,,,un abarzo.
ResponderEliminarHola, Rafa. Yo no tuve más remedio que dejar de creer en tus "cánticos", de lo contrario, o hubiese tenido que dejar de leerte, o bien, haber hecho lo imposible para que fueras al psiquiatra, me tenías simpre el alma en vilo. Claro, que eso no quita que tus palabras me enternezcan.
ResponderEliminarUn abrazo grande.