La visita en el espejo
En mitad de la noche hasta mi casa
De visita ha venido la tristeza
Y la espalda le he dado con espanto.
Entonces mis pupilas, de soslayo,
Buscando en el espejo, ha perseguido
Y al fin, cuando ha alcanzado a ver su eclipse,
Me ha llamado “su hermano”…
Y ha llorado.
La tristeza sólo viene de visita y por fortuna, se va...
ResponderEliminarÉchala!; yoo te ayudo con una sonrisa y un beso.
ResponderEliminarR.-)
A ver si lo entiendo ¿has hecho llorar a la tristeza? es así?
ResponderEliminarAbrazos
Alegría te deseo para este finde que se aproxima... bueno, en realidad, para todos y cada uno de los días de tu vida.
ResponderEliminarBellímo
Baci
Hay que romper los espejos Rafa. Visitas tan inoportunas no merecen réplica.
ResponderEliminarUn beso
Jo!
ResponderEliminar:S
Besos.
Milena, no sé si la hice llorar, pero lo hizo. El porqué nunca lo sabremos. Pudo ser por compasión, por envidia, por rabia...
ResponderEliminarUn abrazo.
A mi me han dicho que la tristeza no llora salvo cuando sueña con sonrisas.
ResponderEliminarllevo largo rato leyéndote y no me extraña que hagas llorar a la tristeza. Tú eres capaz de conmover a quién te propongas con estos pedazos de poemas.
ResponderEliminarUn beso, grandote.
Te esperamos el sábado.
Puede ser Victoria, aunque no deja de ser una paradoja que el vértigo quedo y brumoso de la ciénaga termine por conmover a las auroras.
ResponderEliminarUn beso. Allí estaré.
Buenas noches, chiquito y hazme el favor de pasar ya ya a otro poema que el ojo ese...aggg me recuerda a lo de la catequesis "el ojo que todo lo veía" que miedo madre madre.....
ResponderEliminarEnga!
asi se cuela de rondon en nuestra alma y ya no nos deja, gran amiga se instala en la alcobe, en la mesa del comedor, entre los libros, en el polvo que levantamos por el camino...bello y triste y desgarrador poema. Me has traido ecos de nuestra Rosalia, un alma en pena que dejo pomas increibles e increiblemente tristes.
ResponderEliminarUn fuerte abarzo.
Aunque yo no soy la alegría de la huerta precisamente en estos momentos, siempre habrá sonrisas para tí.
ResponderEliminarY mil besos desde mi luna.
Echaré la tristeza de mi casa, bien deprisa y bien lejos; me rompe el corazón.
ResponderEliminarA ti te voy a guardar.