Reflejo en la tristeza del azogue,
Criaturas abisales pavorosas
Irrumpen en la arteria de la noche
E infartan hacia el orto su bocana.
So la sed amarilla se desboca
Un mar que, a golpes, gime como plaga,
Sangrando verdeazules en su herida.
El viento se ha inmolado en sus afanes:
Las alas no mantienen ya su vuelo,
Mudado ya su anfibio terciopelo
En áridos y abruptos alacranes
Que infectan los periplos de la brisa;
Percuten en las velas de la aurora,
Surgidas de la sal y la deriva,
Infaustas telarañas que, en orgía,
Devoran su graznido a las gaviotas:
No cabe tanto náufrago en cubierta,
No cabe en la sentina tanto llanto,
No cabe en las pupilas del corsario
El trágico ulular de las sirenas
Ni el tacto de sus garras como acero,
Clavándose en las aguas de su anhelo.
Qué lánguido velero en su zozobra;
Qué tétrica quietud en la galerna
De un vientre de papel falaz y esquivo,
Mudando a la esperanza en vasta escora.
El puerto desolado, entre la niebla,
Se rinde a la Gorgona del olvido.
Criaturas abisales pavorosas
Irrumpen en la arteria de la noche
E infartan hacia el orto su bocana.
So la sed amarilla se desboca
Un mar que, a golpes, gime como plaga,
Sangrando verdeazules en su herida.
El viento se ha inmolado en sus afanes:
Las alas no mantienen ya su vuelo,
Mudado ya su anfibio terciopelo
En áridos y abruptos alacranes
Que infectan los periplos de la brisa;
Percuten en las velas de la aurora,
Surgidas de la sal y la deriva,
Infaustas telarañas que, en orgía,
Devoran su graznido a las gaviotas:
No cabe tanto náufrago en cubierta,
No cabe en la sentina tanto llanto,
No cabe en las pupilas del corsario
El trágico ulular de las sirenas
Ni el tacto de sus garras como acero,
Clavándose en las aguas de su anhelo.
Qué lánguido velero en su zozobra;
Qué tétrica quietud en la galerna
De un vientre de papel falaz y esquivo,
Mudando a la esperanza en vasta escora.
El puerto desolado, entre la niebla,
Se rinde a la Gorgona del olvido.
Gracias, Shade, por la imagen.
Cuánto siento que pierdas la esperanza, algo tan valioso y tan necesario. No lo hagas; lucha, ama, ríe, llora, vive, sueña...
ResponderEliminarUn beso dulce
Sin palabras.
ResponderEliminarPero te dejo un abrazo de aquí a allá.
Cuanta tristeza Rafa… no dejes que anide en tu corazón, no te merece, seguro que tú puedes con ella.
ResponderEliminarTus palabras siempre me reconfortan y me llenan de ilusión, gracias por eso, ojalá algún día las mías hagan lo mismo contigo.
Mil besos.
Un torbellino
de besos resbalando
por tu nariz
pasando por tus labios
hacia tu corazón.
:)Sonríe!!!
Bella metáfora Rafa, comparar la esperanza como un frágíl barco de papel que naúfraga antes de llegar a puerto.
ResponderEliminarTriste poema,Besos.
Y gracias por la tanka.
Quisiera poder regalarte alguna a ti, pero ante tus palabras siempre me quedo petrificada, no sé será que la Gorgona me mira.