Con la noche cerrándose a destiempo,
La aurora abre sus alas, cual ensueños quebrados,
Mordiendo al sol los párpados.
Ciego el astro rey de infecundo espanto,
Abdica abandonando su aureola
A las sórdidas hordas de abstinentes tiranos
Que, en sus restos celestes, alzarán un patíbulo
Para ahorcar sin piedad y en brutal ignominia
Al fruto de la soga y la mandrágora.
La aurora abre sus alas, cual ensueños quebrados,
Mordiendo al sol los párpados.
Ciego el astro rey de infecundo espanto,
Abdica abandonando su aureola
A las sórdidas hordas de abstinentes tiranos
Que, en sus restos celestes, alzarán un patíbulo
Para ahorcar sin piedad y en brutal ignominia
Al fruto de la soga y la mandrágora.
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Mi querido poeta
ResponderEliminarpaso brevemente a visitarte.... y dejarte mi abrazo desde Eea, ya veo que sigues viviendo por/parala poesía...
http://www.youtube.com/watch?v=if1wVeaZvUw&feature=related
Delicioso y con referencias magicas, llenas de tiempo pasado...un abarzo.
ResponderEliminarMe gusto muchisimo la combinación de texto y foto :)
ResponderEliminarBesos.
Bestial¡ Buenísimo¡, eres un crack de la poesía, si señor.
ResponderEliminarTe abrazo suave