Duele.
Me duele en mitad de la sangre.
Me nace este dolor del corazón
Y se expande, latido tras latido,
Como una plaga, cual maraña, como cáncer,
Dejando a su paso tierra quemada,
Mordiendo sin piedad
La esperanza y mis nervios,
Los más frágiles vasos
Capilares.
No hay
Momentos de calma.
Persiste, aun de noche, en sus embates
Infectando mis sueños
De aroma a duermevela,
De la vigilia
Por un niño enfermo,
De agonía incesante.
Sube y sube este dolor irrefrenable
Y duele duele duele…
Duele,
Duele,
Me duele.
Eres un caso... te quejas mucho... ya te dare yo tiritas y betadine... jajajja primeros auxilios... el 24 tengo mi ultima sesion de kimio, luego te dejo me emborraches juassssssssss :D
ResponderEliminarTe exo de menos grandullon :*
Hay dolores fecundos, que nos templan, hay de los otros, que persisten a pesar nuestro.
ResponderEliminarY claro que duele, casi que lo siento en mi carne.
Un abrazo, Rafa
la verdad es que tus poemas gustan, pero parecen tan cargados de dolor que, eso, duelen.
ResponderEliminarMe duele hasta a mi Rafa...siempre compartido dicen que duele menos. Un beso.
ResponderEliminarMe duele hasta a mi Rafa...siempre compartido dicen que duele menos. Un beso.
ResponderEliminarDuele, Sí Rafa, duele tanto que es indescriptible
ResponderEliminarni la muerte puede ser tan dolorosa
no hay ningun tipo de antídoto,
ni palabras de ánimo,
solo dolor y muerte
muerte y dolor
desangrandose está mi alma
y yo desde aquí la observo
eso aún es más doloroso
ser consciente de esa huida del ser
donde está el "yo"
donde están las risas
están en un paréntesis
esperando que sea su beso
quien las rescate
dondé están mi ojos
esperando a que él los vea
dónde está mi cuerpo
se lo ha bebido el abandono
dónde estoy yo
no sé
tal vez habitando la sobra
de los recurdos.
Gracias Rafa, un fuerte abrazo