Del sudario de la noche
Se me nace un sueño muerto;
Y en el luto de la aurora
Abro entre lilas su tumba.
(Para tan pequeña muerte
No se hicieron ataúdes).
Se me nace un sueño muerto;
Y en el luto de la aurora
Abro entre lilas su tumba.
(Para tan pequeña muerte
No se hicieron ataúdes).
Enero de 2007
Bello y enigmatico, onirco y rico en matices...un fuerte abrazo.
ResponderEliminarCABOS SUELTOS
ResponderEliminarDe la intimidad de la noche
Náceme un sueño blanco
Y en las lilas de la aurora
Abro de este nudo un lazo
Abrazos
Hay momentos,
ResponderEliminarheridas que son una condena
que desgastan el tiempo
y la vida nunca pasa
pero mientras existan
ganas y fortaleza
nunca revocaré
o destrozaré mi esperanza.
Gracias por tus palabras Rafa, realmente tienes mucha razón, ¿qué sería de nosotros sin poder expresar lo que sentimos? Menos mal que tenemos la suerte de poder plasmar en las letras los sentimientos que nos ahogan.
Esta muerte es pequeña pero a la vez es enorme, pues no hay dolor más grande que sentirte sin vida, teniendo toda una vida por delante.
Un beso.
Hola de nuevo, amigo Rafa.
ResponderEliminarAquí estoy, para alimentar el alma con tus versos.
Siempre me han gustado tus poemas breves. Granos de oro.
Un beso.
La imagen de un ataúd para un sueño muerto es de lo más original que he leído, contrasta además con el blanco del duelo. Mucha belleza en las metáforas de este breve poema, un abrazo
ResponderEliminarEn este caso diría...
ResponderEliminarlo breve, si bueno, mejor todavía.
Abrazos