Extraño título para un poema
Sin nada que ofrecer;
Para unos versos que, dolidos,
Se ahogan de impotencia;
Para un grito de auxilio, como súplica,
Que reclama emerger de la tristeza
Aferrado a sus manos…
Para Eulalia, sí, para Eulalia,
Con la ausencia como bandera,
Sin rumbo ni equipaje,
Con las manos vacías,
Sin nada,
---------------- sin nada,
--------------------------------- sin nada.
Aunque sean para remontar el vuelo, Rafa, aunque sean para eso los versos ya tienen sentido.
ResponderEliminarUn abrazo y me alegro de volver a leerte
Sandra
El arte se sirve de ti y no tú del arte. Por más que el dolor te invada, sigue escribiendo. Este dolor que te deja sin palabras se calmará, y tú seguirás siendo.
ResponderEliminarEsas manos no están vacías, Rafa. En esas palabras no hay vacío, hay mucho cariño.
ResponderEliminarUn beso.
Que versos!!
ResponderEliminarMuy sentidos .
Paz/
Sólo un título, dices, ¿será que el poeta, en esta ocasión, ya lo ha dado todo?
ResponderEliminarLas manos vacías se pueden llenar.... pero a veces no con lo que uno espera; para bien, o para mal..