Hoy me corté afeitándome
y a borbotones manaba la sangre.
Ya ves, tanto tiempo muerto por dentro
y aun así
-------------- tan henchido de sangre.
Esa sangre que, unas sesenta veces
por minuto, golpea
mis ojos, mi piel, mis manos, mi lengua,
mi alma, mi sexo, mis sienes, mis venas,
la herida que abierta llevo en el pecho
y todo mi ser, de aullidos callados.
Hoy me corté afeitándome
y a borbotones manaba tu nombre.
no sería mal anuncio para un after shave...
ResponderEliminarHola Rafa.
ResponderEliminarMe gustó.
Desbordante manantial de dolores aullantes. Borbotones de dolor y muerte en vida..., por amor.
Borbotones de creatividad dolorida...
..................................
Si al final vais a conseguir que yo también me haga poeta. Algo impensable hace unos meses.
Abrazos a borbotones.
¡Borbotones=Borbones?...¿No estaras exagerando....(Es broma)
ResponderEliminarMe recuerdas la conquista de Gala por Dali, asi con cortes y sangres...el arte, ya se sabe, tu arte.
Un abrazo.
Se llama Eritrocita??? En este caso el después del afeitado recomendado es un buen trocito de papel pegadito(al menos eso es lo que he visto en ocasiones)con un poema escrito en rojo, beso
ResponderEliminarPues, larrey, a ver si es verdad, espero ofertas, jajajaja...
ResponderEliminarSecre, desbordante ciertamente. Si lo conseguimos, yo al menos me sentiré honrado. Pocas cosas hay tan gratificantes como sacar a alguien la poesía que todos llevamos dentro. Gracias.
Prometeo, je, je, sí, últimamente esto de los borbotones, digo borbones, me trae de cabeza. Gracias.
Leuma, jajajaja, eritrocita, no, no es ese el nombre, aunque cierto parecido se me antoja que tiene, jajajajaja, me has hecho partirme de la risa. Gracias por el buen humor. Y lo del trocito de papel doy fe de que es lo da mejor resultado, y es que los remedios de la abuela, en este caso del abuelo, a veces sí que funcionan.
Abrazos.
Ya ves, tanto tiempo muerto por dentro
ResponderEliminary aun así
-------------- tan henchido de sangre.
De los que más me ha gustado hasta el momento. Sobresaltando esos versos.
Otro abrazo
Sandra