(Scolopendra gigantea)
El dictador ha perdido,
De sus patas, la penúltima:
Va arrastrando los despojos
Que quedaron de su inquina
Como si fuera un vulgar
E inofensivo gusano.
Pero sigue su veneno,
Alojándose en su entraña,
Expectante, preparado.
Si lo encuentras por los valles
O en las amplias alamedas,
Sin piedad, has de aplastarlo.
"...la alegría de Nino cazador de cucarachas, Nino sapo, Nino pescado..." , ni tigre, ni hormigas, ni mosquitos, ni microbios ni mamboretá verde,... un gusano lleno de veneno y de patas!, beso
ResponderEliminarLos muertos, creo que levitamos, porque no sé si podré pisar nada.
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