Van errabundos mis pasos
Sin paso al frente ni huellas
Del manicomio al cadalso.
Siempre he buscado
------------------------------ gritar por el hombre,
Por primaveras de paz y de sueños.
Pero, perdido en las letras de un nombre,
Me extravío en mis zapatos
Con los cordones al cuello,
Teñido de camposanto;
Pero que yazca
----------------------- dejadme en mi invierno
Sin tener que saber de paraísos
Mientras mis huesos se pudren de infierno.
(Un círculo, dos círculos, tres círculos…
Sigo hasta llegar a nueve.)
Paso a paso descubro tus letras...
ResponderEliminarPaso a paso...
Y tu invierno es mi primavera cuando estos ojos te encuentran..
Un abrazo Rafa.
Rafa, ya estoy por aquí de nuevo.
ResponderEliminarABRAZOS
Gracias, el viento. Siempre en el invierno, aunque tan latente que no lo adivinemos, hay un germen de primaveras.
ResponderEliminarMe alegra leerte, Paco. Veo que en esta ocasión tampoco ha podido contigo el polvo del camino.
Abrazos.
Los pasos errabundos se van parando por las esquinas a ecribir preciosos poemas.
ResponderEliminarSi así lo deseas, te dejamos en tu invierno, pero te mandamos el sol de primavera para que sigas escribiendo poemas como este.
Un abrazo.
Mamen.
Tus visitas, Mamen, siempre traen aroma a primaveras.
ResponderEliminarUn beso.